José Luis Colla Davalos (21) convivía con Milagros Maidana en una casa en la citada localidad del sur del conurbano, que le pertenecía al abuelo de la víctima. Se conocieron en el trabajo, en el Parque Industrial de Quilmes. Tenían un noviazgo conflictivo que duró al menos dos años. Pero él no aguantó más y le dijo que tenían que terminar.
Entre las 21 y 22 del 25 de abril, ella fue a buscar algunas cosas que le habían quedado en la casa Colla Davalos. Pero esa noche, los vecinos escucharon tres detonaciones y llamaron a la Policía. Cuando arribaron los uniformados, encontraron al muchacho tirado en el suelo sobre un charco de sangre.
En esa vivienda también estaba la mamá de la chica, Alejandra Coronel, que vio todo. Esta última declaró ante la Justicia y dijo que José Luis había querido agredir a su hija y que tuvieron una discusión. Por eso, la chica llamó a su papá, Julio Ricardo Maidana, que vive en Rafael Calzada, partido de Almirante Brown. Ambos se dirigieron a la vivienda de la víctima.
Maidana y Coronel llegaron minutos después y, sin mediar palabra, el hombre le disparó por la espalda. No le dio chances a reaccionar. Las balas impactaron en el cuello del muchacho y fueron letales. Pero, cuando la Policía fue al domicilio, el agresor ya no estaba.
Después de acribillar a su yerno, el atacante huyó en su VW-Vento color gris y hasta ahora, nada se sabe de él. Mientras tanto, Colla Davalos se desangraba en su casa y fue trasladado al Hospital Mi Pueblo por los vecinos. Murió apenas unas horas después.
Pesquisas de la DDI varelense, trabajan para dar con el paradero del sindicado, indicó el abogado Maicol Kehl.
Desde el primer día, los familiares y amigos del occiso salieron a las calles a pedir la detención de su suegro, de su novia y la mamá, ya que denuncian que “fueron cómplices del asesinato". Además, aseguran que fue una “emboscada” y creen que el crimen fue planificado.




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