El director de la Clínica Olivos, Federico Dimitroff,
declaró hoy en el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona y ratificó que
los médicos de cabecera eran el neurocirujano Leopoldo Luque y la psiquiatra
Agustina Cosachov.
Fuentes judiciales informaron a la agencia Noticias
Argentinas que el médico prestó testimonio durante más de cinco horas y reiteró
que su recomendación era que el astro futbolístico continuara el tratamiento en
un centro de rehabilitación por el postoperatorio del hematoma subdural y su
adicción al alcohol.
"Siempre defendió la posición de la Clínica
Olivos", indicó la fuente a este medio.
Dimitroff mantuvo cruces con las querellas que le
preguntaban constantemente sobre Swiss Medical, la prepaga que gestionó la
internación domiciliaria del paciente en la casa del barrio cerrado San
Andrés.
Uno de los particulares damnificados lo interrogó acerca de
la presencia de un médico clínico en Tigre, a lo que el profesional respondió
que "no estaba establecido todos los días, pero a sí a demanda de los
especialistas que cuidaban a Diego".
Los querellantes consideraron que Dimitroff incurrió en una
contradicción porque en su declaración ante la fiscalía de Patricio Ferrari,
Cosme Iribarren y Laura Capra sostuvo que "ponían a disposición un
médico".
El titular del sanatorio respondió: "Es más o menos lo
que acabo de decir. A disposición significa lo mismo que a demanda".




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