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Iba a ser papá en una semana y lo mataron para robarle la moto




Cuando salió de trabajar, Sebastián Ochoa le mandó un mensaje a su pareja, Daniela. Era algo que hacía

todos los días para avisarle que ya había terminado su jornada. 20 minutos lo separaban de su casa cuando en el camino fue interceptado por cuatro motochorros que lo mataron para robarle su moto. “No se resistió y lo mataron igual”, contó Daniela en diálogo con TN.

A las 6.17 del viernes, el joven de 26 años, empleado de una estación de servicio de José C. Paz, se retiró de su lugar de trabajo ubicado en la ruta 8. A solo diez cuadras, en la esquina de Luis María Drago y C. Brughetti, cuatro delincuentes divididos en dos motos lo interceptaron.

Ochoa no quería problemas y les dio el vehículo, pero esto no fue suficiente. Mientras intentaba escapar para que no le hagan daño, le dispararon y lo mataron. “Se bajó y cuando el segundo ladrón subió a la moto le tiró a quemarropa por la espalda. No fue un robo, fue una ejecución a sangre fría”, aclaró su amigo Ezio.



Al igual que cuando salía del trabajo, Sebastián también le avisaba a su pareja que había regresado. Aunque esta vez los minutos pasaban y no daba ninguna señal. Daniela lo llamó preocupada, pero seguía sin responder. Pocos minutos después, su cuñada le comunicó que lo asesinaron a sangre fría.

De acuerdo al relato de la pareja, los mismos motochorros que lo mataron cometían diversos robos en la zona: “Todos los vecinos vivieron hechos delictivos, es muy jodido el lugar”. Además, describió que los mismos ladrones que lo mataron un día antes intentaron robar otra moto.

En la causa interviene la fiscal Mirna Sánchez, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 19 descentralizada de Malvinas Argentinas, quien ordenó el traslado del cuerpo a la morgue para realizar la autopsia.

En tanto, la Policía Bonaerense lleva adelante diversas tareas de inteligencia para poder encontrar a los homicidas, que todavía siguen prófugos.

Ochoa iba a ser papá por segunda vez

Sebastián tenía un bebé de 2 años y dentro de una semana estaba por nacer su otra hija (ambos los tenía con su expareja). “Todo el mundo lo quería. Era bueno y laburador. Vivía por sus hijos”, recordó Daniela, mientras que Ezio lo describió de la misma manera: “Era una persona maravillosa y muy laburador. Un padre con todas las letras”.

Este lunes a las 11, familiares, amigos y allegados realizarán una marcha en la puerta de la comisaría del barrio Frino para pedir justicia. En paralelo, iniciaron una campaña solidaria para ayudar a la familia.



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