El secretario de salud Amadeo Echeverría aseguró que ven
con preocupación lo que sucede con los adultos mayores alojados en los dos
hogares (el municipal y el privado) que existen en la ciudad porque aún no hay
recibido su dosis de vacunas contra el COVID porque depende del PAMI y, desde
esa institución, no permiten al municipio poder avanzar con la campaña.
Anoche se confirmó que una abuela del hogar de Mitre y
Avellaneda dio positivo de COVID y ahora intentan determinar si un compañero,
que presenta líneas de fiebre, también es portador del virus.
Al mismo tiempo se preparaba para esta tarde la visita a
ese sitio de un equipo de especialistas para hacer hisopados masivos con el fin
de descartar alguna persona asintomática o con síntomas leves que no logran ser
percibidos por las enfermedades de base de los allí ingresados.
“Da la sensación que la gente se ha relajado. Hay una sensación de post pandemia o nos hemos acostumbrado. No sé si la vacuna da una falsa sensación de seguridad. Pero los casos siguen, los contagios y no podemos bajar. Nos mantenemos cercanos a los 40 casos activos en promedio”, dijo Echeverría.
Por otro lado evaluó que en este “relajamiento” “estamos
contagiando a mayores” y que eso conlleva a que haya una población en riesgo,
de entre 60 y 70 años, que tiene comorbilidades, y termina con internaciones
que se extienden en el tiempo.




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