En las últimas 24 horas, la región fue sacudida por una preocupante sucesión de estafas telefónicas y virtuales que dejaron un saldo millonario. Delincuentes lograron apropiarse de al menos $11.351.000 mediante ardides telefónicos y digitales, apuntando en su mayoría a personas mayores, con llamados que simulaban provenir de entidades como PAMI, bancos, Telepase, supermercados y empresas de servicios públicos.
Uno de los primeros hechos fue denunciado en Mar Azul, donde una jubilada de 75 años relató que recibió una llamada de un supuesto asesor de PAMI por WhatsApp. Siguiendo instrucciones bajo engaño, terminó facilitando el acceso a su cuenta bancaria. Días después, al presentarse en el Banco Nación, le informaron que había realizado una transferencia de $590.000 a una cuenta del Banco Santander que nunca autorizó.
Otro caso se registró en el centro de Villa Gesell, donde un hombre de 69 años fue contactado por personas que decían pertenecer a la empresa Telepase. Le indicaron que debía actualizar datos vinculados a su medio de pago. Al acceder a su home banking, los delincuentes aprovecharon para efectuar transferencias y adelantos de haberes desde su cuenta sin su autorización.
En Pinamar, una mujer de 33 años cayó en una estafa tras haber publicado un mueble en venta en la plataforma Marketplace. Un supuesto comprador la guió a través de una operación bancaria y, mediante engaños, le gestionaron un préstamo de $5.000.000 en el Banco Francés, dejándola con una deuda que ahora debe reclamar.
Otra vecina de Pinamar, de 80 años, fue contactada por alguien que se hizo pasar por representante del Banco Nación. Le dijeron que había sido beneficiada con una Netbook de regalo, y para poder acceder al supuesto premio le solicitaron datos personales y bancarios. Poco después constató la sustracción de $440.000 de su cuenta.
En Ostende, también partido de Pinamar, un técnico de 68 años denunció que recibió un llamado con la promesa de descuentos exclusivos en estaciones de servicio YPF. Siguiendo las instrucciones del supuesto agente, terminó realizando una transferencia de $111.000. Minutos más tarde, su celular fue bloqueado.
En Valeria del Mar, una jubilada de 74 años atendió un llamado de un presunto empleado del supermercado Coto, quien le ofrecía descuentos. Tras una breve conversación, el estafador obtuvo sus datos y accedió a su cuenta bancaria. Allí, constató que le habían robado $241.000, los cuales fueron transferidos a una cuenta del Banco Galicia.
En General Madariaga, una mujer de 79 años fue víctima de una compleja maniobra. Fue contactada también por alguien que decía ser del supermercado Coto, quien le envió un enlace que al ser abierto permitió a los estafadores ingresar a sus cuentas bancarias. Desde su cuenta BNA+ se realizaron transferencias por $1.470.000, y desde su cuenta DNI por otros $300.000, todo sin su consentimiento.
Por último, en Castelli, una jubilada fue engañada por supuestos representantes de la empresa Camuzzi Gas, quienes le ofrecieron un falso descuento del 50% por ser jubilada. Durante la llamada, facilitó datos personales y bancarios. Posteriormente, descubrió que se habían realizado dos transferencias, una por $999.999 y otra por $500.000, además de la gestión de un préstamo por $1.800.000.
Todas las estafas fueron denunciadas en las correspondientes dependencias policiales y son investigadas por las UFID de Dolores, Pinamar y Castelli. La modalidad se repite: llamados desde números con logos falsos, ofrecimiento de promociones, captación de datos y posterior vaciamiento de cuentas.
Las autoridades recomiendan a la población no brindar información personal ni bancaria por teléfono, desconfiar de supuestas promociones o premios, y verificar siempre con las entidades oficiales. También se insiste en la importancia de realizar la denuncia inmediata ante cualquier intento de estafa.




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