Media hora, quizás menos, le alcanzó a la tormenta para dejar su huella. Profunda para muchos, que no llegaron a encontrar un refugio y vieron como sus autos sufrieron múltiples abollones, provocados por piedras de gran tamaño que caían a repetición.
Ocurrió en playas de estacionamiento de balnearios, de
supermercados y, por supuesto, entre quienes andaban en circulación y no
encontraron tiempo suficiente como para llegar a encontrar un techo que
brindara protección al vehículo.
Alfredo Rodríguez, titular de Defensa Civil, afirmó que esta
tormenta de granizo llegó de manera “intempestiva” después de las 19 y dejó sus
peores secuelas en la zona sur. Confirmó que hay cuatro generadores vinculados
al suministro eléctrico que salieron de servicio y dejaron sin energía a buena
parte de ese extremo de la ciudad de Mar del Plata.
En zona de Bosque Peralta Ramos también se vivieron horas de
angustia porque varios automovilistas que buscaron protegerse debajo de grandes
árboles vieron como algunos de ellos se venían abajo. De raíz o con sus ramas
enormes. En uno de los casos los conductores quedaron atrapados y se salvaron
de milagro, ya que el tronco golpeó entre el parabrisas y el capot.
Algunos automóviles no solo terminaron este episodio con
múltiples hundimientos sino, incluso, con lunetas partidas. En algunos casos
marcadas, en otros rajadas y más de uno directamente con el cristal astillado,
producto de la violencia del impacto.
“Estamos con todos los recursos del Estado y trabajando
porque hay ramas caídas en el Bosque Peralta Ramos, incluso un árbol también, y
habrá que esperar a tener luz de día para poder cortarlo”, dijo Rodríguez y
resaltó que se está trabajando en todos los sectores, también con apoyo de guardias
de EDEA, para restablecer servicios y despejar calles para normalizar el
tránsito.
A todos estos daños que quedaron a la vista ahora, en los
vehículos y en algunas instalaciones domiciliarias, se sumarán las que se
podrán confirmar mañana, ya con primeras luces del día. Por la violencia del
granizo también se dan por seguro daños en lonas de balnearios y, ya en zona
rural, también en las plantaciones y los equipamientos que ofician como
protección.
Vale recordar que en el extremo sur, que en principio
aparecería como el más afectado, se encuentran varias de las principales
plantaciones de kiwis y también de vides. Precisamente las bodegas arrancaban por
estos días con su vendimia anual.



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