Un niño de 11 años murió ahogado este martes al caer a un pozo de agua, de más de dos metros de profundidad, que se había llenado como consecuencia de las lluvias en la localidad de Uspallata, en el oeste de la provincia Mendoza.
La Policía recibió la alerta pasadas las 16:30 en una zona detrás del hotel Uspallata, en el barrio Villa Clarita. Un llamado al 911 alertó que una persona se había caído al fondo de un pozo y que llevaba varios minutos desaparecido en ese espejo de agua.
Una de las versiones, según la agencia Télam, indicó que el niño estaba jugando aparentemente en el lugar. En un momento dado, sin embargo, el terreno habría cedido y provocó que perdiera el equilibrio y cayera.
El personal policial verificó que se trataba de un pozo producto de una excavación que, debido a las precipitaciones de días atrás, se había llenado de agua con una profundidad de aproximadamente dos metros.
Los uniformados se encontraron con varios testigos en el lugar, quienes dijeron que el joven se había caído de manera accidental y que nunca salió a la superficie. También aseguraron que no ingresaron al pozo porque ninguno de ellos sabía nadar, según consignó el periódico Los Andes.
Los efectivos y los bomberos de la localidad de Uspallata lograron extraer al niño y le realizaron maniobras de RCP a la espera de la llegada de la ambulancia.
Ya en el lugar, los médicos del Servicio de Emergencias Coordinado lo trasladaron al nosocomio local donde constataron el deceso.
Días atrás, un niño de seis años murió al caer en un pozo de más de 50 metros de profundidad en la misma provincia. Ocurrió el 7 de marzo en el departamento de Guaymallén, en un predio donde se construye un complejo de departamentos.
En un caso muy similar, un llamado a la línea de emergencias 911 alertó que un chico de seis años había caído accidentalmente al interior del pozo ubicado en un predio en calle Urquiza, donde hay una obra en construcción de un complejo de departamentos.
Personal Policial se constituyó en el lugar e informó que el padre del niño también ingresó al pozo para tratar de rescatarlo y se convocó a Personal del Cuartel Central de Bomberos y del Servicio de Emergencias Coordinado para trabajar en el rescate.
El padre bajó con una cuerda de aproximadamente 30 metros y después siguió bajando por un caño y luego se largó para tratar de rescatar a su hijo, detalló una fuente policial.
En tanto, desde el Ministerio de Seguridad local indicaron que personal de bomberos logró extraer al niño sin vida y después a su progenitor.
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
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