El joven B. de 17 años de edad que fue atropellado el martes
por la noche por un conductor en Calle 45 y 6 salió del estado grave, se
despertó, comenzó a alimentarse y ahora deberá transitar un largo camino para
recuperarse de diversas fracturas que sufrió. Entre ellas una de cadera y otra de rodilla.
Junto a él fueron golpeados otros dos amigos y uno de ellos
sufrió una fractura de tibia y peroné y, el restante, golpes menores. Todos
ellos habían salido de una despensa, cruzaron la calle y se pudieron a hablar
con un hombre que estaba dentro de una camioneta. El Volkswagen Gol apareció
sin luces, a una velocidad alta y sin mantener el rumbo y los embistió. A B. lo
arrastró varios metros a tal punto que el resto de los testigos pensaron que no
había sido alcanzado por el auto.
Celeste Carrizo, mamá de uno de los afectados dialogó con
CNM Radio 93.3 y relató el calvario que viven porque sienten que no hay
justicia ya que el hombre de 37 años imputado por las lesiones quedó en
libertad a las pocas horas.
Un examen de alcoholemia hecho a los pocos minutos con un
alcoholímetro hubiera cambiado su situación. Pero no fue practicado y se optó
por uno de sangre cuyo resultado se conocerá la semana que viene. De
confirmarse que estaba alcoholizado o bajo los efectos de otras sustancias la
situación del investigado cambiará y podría ser apresado.
Al hablar por radio la mujer aseguró que luego del impacto
contra los menores el conductor comenzó a sacar latas de cerveza del interior
del rodado. Además, agregó que su hijo está con traumas y tiene problemas para
conciliar el sueño debido a haber presenciado todo y ver cómo eran atropellados
sus amigos.
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