Leticia Trinidad Carrara, de 58 años de edad, fue condenada
hace horas por el Juzgado Correccional 2 de Dolores a dos años de prisión de
ejecución condicional e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos
por defraudar al estado al cobrar en efectivo, y no depositar en las cuentas
bancarias correspondientes, a los afiliados del IOMA entre julio de 2007 y
octubre de 2011.
Todo se resolvió en un juicio abreviado en donde las partes
llegaron a un acuerdo acerca del reconocimiento de la responsabilidad por parte
de la procesada, ahora juzgada, y el fiscal Gustavo García.
La figura impuesta fue la de “administración fraudulenta
agravada” y la Delegada en ese entonces de la oficina local admitió el apoderamiento
de sumas de dinero que fueron cobradas a los beneficiarios voluntarios al
Instituto de Obra Médico Asistencial.
Fue una de empleada quién realizó la denuncia al detectar la
maniobra y comprobar que las mensualidades nunca habían sido apostadas a la
obra social estatal.
Reconoció un nombre y apellido de una mujer que sería
quitada del sistema por reiteradas faltas de pago y comprendió que mensualmente
iba al lugar a abonar por lo que la contactó y se dio cuenta lo que venía
sucediendo con esa beneficiaria y otras personas.
En muchas oportunidades esta única empleada por aquel entonces
en el IOMA era enviada a realizar trámites o mandados diversos en los momentos
en los que se acercaban quienes debían hacer los pagos voluntarios.
En total fueron 16 casos detectados y se pudo comprobar que
algunos tenían en su poder comprobantes con firma y sellos de la delegada Trinidad
Carrara.




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