Central de Noticias Madariaga tuvo acceso a uno de los llamados extorsivos que realizan presos de una cárcel cordobesa en la que prometen un premio de un teléfono celular marca Samsung S8 y un bono de 35.000 pesos para el ganador.
El llamado
ingresó esta tarde al celular de un vecino. Previamente le habían enviado un
SMS a manera de respaldo para hacerlo más creíble.
Excusas,
palabras difíciles, leyes y organismos del estado forman parte del armado que hacen
para confundir y darle credibilidad a la cuestión.
“Soy un analista de sistema de Home Banking Argentina” es lo primero que se escucha como difícil de entender. A las claras está que un analista de sistemas nunca haría un llamado del tipo telemarketer dado que su trabajo es chequear los sistemas informáticos y no hacer sorteos y llamar a ganadores.
El número del cual llaman por estas horas |
“Una
acreditación de 35.000 pesos blanqueados y declarados ante la AFIP” tampoco
sería una frase acorde para un llamado de este tipo porque la palabra blanqueo no existe en ningún manual de marketing.
“Esta llamada está siendo grabada, fiscalizada y supervisada ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación para una mejor atención al cliente” suena un tanto irreal que la justicia verifique y controle las llamadas de una empresa privada por un sorteo.
Acto seguido comienza todo el cuento de intentar llevarlo al cajero para que cambie claves de home banking con lo que intentarán apoderarse de su cuenta bancaria.
El vecino
le indica que está a 15 cuadras del cajero e, igualmente, le dicen que lo van a
esperar.
“Este
premio es a cambio de una publicidad”, otra frase increíble en la cual con una
selfie del ganador que saldría en la TV Pública la empresa justificaría la
entrega de un sorteo en donde el hombre jamás se anotó ni participó.
“Mientras
vos vas al cajero nosotros vamos a ir recargando el sistema para ingresar un
pin fiscal”, aquí ya le está anticipando que le pedirá un blanqueo de clave de
home banking –porque de hecho la empresa de la que llame lleva ese nombre- para
poder quedarse con la versión digital de la cuenta bancaria de la víctima.
“No podemos
tener error porque por un número y una letra podemos transferir para otro lugar”,
es otra de las excusas.
La imagen de un cambio de PIN para acceder al Home Banking |
Luego le
pasa su nombre: Javier Alejandro Lucero, Analista de Sistemas de Home Banking Argentina
y un número de matrícula determinado para darle más credibilidad y afianzar el
vínculo.
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
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