Este lunes es un día triste para marplatenses, turistas y sobretodo para los trabajadores de la tradicional confitería Boston que cierra sus puertas.
”Hoy es el último día de la Boston en la ciudad. Los clientes no lo podían creer, la noticia les pegó muy fuerte. Esta lucha empezó hace 6 años”, expresó Carlos Murcia, uno de los empleados de la firma que trabaja hace 18 años en la firma.
Un acuerdo en tribunales lleva a que los últimos dueños, que enfrentan una causa por quiebra fraudulenta, puedan recuperar este local que está frente a la Plaza del Milenio y el otro, donde funciona la planta elaboradora, pase a manos de un empresario que lo había adquirido hace tiempo.
“Hay gente que viajó para poder comprar los últimos productos. Ha venido mucha gente a ofrecer trabajo. Otros queremos descansar un poco, va a ser muy difícil. Hay mucha gente grande que no vamos a tener la oportunidad de trabajar”, completó el trabajador.
Asimismo, reveló: “No quisimos elaborar de mas para que no quedaran productos. Los compañeros van a venir a acompañar y estaremos hasta las 20 vamos a hacer la entrega de llaves”, concluyó Carlos.
La administración judicial se inició en 2019, luego de algunos años de crisis que tuvieron en medio el anuncio del ingreso de un comprador o capitalista del exterior con el que los dueños planeaban hacer de Confiterías Boston una marca que podría exportar sus productos. Nada de eso resultó.
Por el contrario, el personal que por entonces se contaba muy por encima del centenar comenzó a ser cesanteado. El conflicto escaló y la empresa terminó en manos de la justicia, que constituyó una sindicatura y permitió que un grupo inicial de 14 o 15 trabajadores volvieran a producir mercadería y vender al público.
Este verano, según se pudo conocer, se llegó a contar con más de medio centenar de trabajadores debido a la demanda habitual que se da con el mayor movimiento turístico y la llegada que la marca tiene entre quienes visitan y conocen la ciudad.
La administración judicial permitió así que la empresa siga en funcionamiento y el personal pueda continuar, con paulatinas incorporaciones. “Tuvimos un cumplimiento eficaz de la sindicatura, que nos pagó todo como correspondía, tanto que hoy estamos al día con los sueldos”, aseguró Murcia a Ahora Mar del Plata.
Los dueños, acusados y enfrentando la causa judicial, llegaron este mes de agosto a una instancia de acuerdo en tribunales. Cumplieron con el pago de créditos comprometidos y así evitaron llegar a la instancia de juicio oral, tal como se perfilaba en el expediente.
Confirman que el local de avenida Constitución se entregará al nuevo dueño, que le daría una finalidad distinta a la actual dinámica gastronómica. En tanto los empleados confirman que las llaves del local de calle Buenos Aires se dejarán en manos de los funcionarios judiciales ya que el inmueble pasa a ser garantía de los compromisos que los responsables de la firma todavía tienen pendientes con sus trabajadores.
Murcia destacó como positivo en el marco de esta situación poco agradable que se llegue al fin de la empresa en un marco de orden. “Los chicos nuevos saben que el 30 se termina, que tiene sueldos cobrados y que se les pagará indemnización con todas las garantías de ley”, dijo y diferenció de lo que les pasó en 2018: “En ese momento nos tiraron a los tiburones, con una mano atada atrás y otra adelante”, advirtió sobre las dificultades que afrontarían.
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
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