El cuerpo de una abuela de 81 años fue encontrado esta noche
en una casa del barrio San José y la principal línea investigativa se orienta a
que habría sido atacada durante un episodio de robo.
De acuerdo a la información que dejaron trascender fuentes
oficiales, la mujer fue identificada como Elisabeth Othondo (81) y la mecánica
de la muerte no había sido confirmada hasta el momento.
El caso se descubrió cuando algunos vecinos y allegados, que
tenían llave, entraron al domicilio de Rodríguez Peña al 2700 y encontraron
desorden, algunos rastros de sangre y advirtieron que salía humo de una
habitación por lo que inmediatamente llamaron al número de emergencias.
Cuando el personal del Cuartel Central llegó al lugar
estableció que dentro de la vivienda había un cuerpo sin vida y que la
habitación en la que apareció el cadáver presentaba señales de ahumamiento
producto de lo que pareció ser un incendio intencional..
De inmediato fue notificado el fiscal Leandro Arévalo, quien
se hizo presente y se interiorizó de los hechos, resolviendo iniciar una
investigación enfocada en un homicidio. Además de ordenar las distintas tareas
primarias de rigor, el fiscal solicitó a la Municipalidad el análisis de las
cámaras de seguridad de la zona. Precisamente el secretario de seguridad,
Martín Ferlauto, siguió de cerca las acciones y puso los recursos municipales a
disposición para el rápido esclarecimiento de lo sucedido.
El cuerpo de peritos de la Policía Científica trabajó de
manera prolongada en el domicilio y aún no había elaborado un informe sobre la
forma en la que fue ocasionada la muerte.
El caso se asemeja al del 7 de mayo pasado cuando en el
interior de una casa del barrio Bosque Peralta Ramos fue descubierto el cuerpo
calcinado de María Angélica Rossi (74). Ese domingo amigos de Rossi llegaron a
la vivienda al no tener respuesta a las llamadas y vieron que se había
producido un incendio. Poco después acudieron bomberos y policías de la
comisaría quinta, que hallaron el cadáver. La mujer se aprestaba a realizar un
viaje al exterior, por lo que la posibilidad de un robo estuvo siempre dentro
de los posibles móviles.
La autopsia reveló a la fiscal María Florencia Salas que
Rossi presentaba golpes en el cráneo, por lo que el caso pasó a ser considerado
un “homicidio”.
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