Una mujer de unos 30 años de edad denunció en las últimas
horas haber sufrido un robo calificado en su casa de Calle 2 al 2300 en donde
dos hombres ingresaron a la finca con intenciones de llevarse dinero.
La víctima, quien posee una verdulería en pleno centro de la
ciudad, estaba en su domicilio y salió al patio a dar de comer a los perros. Al
retornar dejó la puerta principal sin llave y se sentó a mirar televisión en el
sillón del comedor. Pasaron algunos minutos, la puerta se abrió y un hombre de
contextura delgada entró y le dijo: “cállate la boca. ¿Tu hijo dónde está?”. La
preocupación era el menor, que tiene unos 12 años, y quién tenía mayores
posibilidades de escapar, aunque no estaba en la propiedad en ese momento.
El primer atacante hizo pasar a otro, también de unos 40
años de edad y de contextura delgada, y este último sacó un pequeño revólver y
le apuntó en la cabeza a la mujer. Allí empezaron a pedirle dinero de manera
insistente. Hacían referencia a dólares que podrían haber allí. Con una chalina
le ataron las manos y fueron llevándola por distintos ambientes para
consultarle sobre distintos bienes.
“Sabemos todo de ustedes” le decían y reiteraban el pedido
de dinero que supuestamente tendrían guardado.
Cajones y muebles fueron revisados sin que obtengan el botín
que buscaban. En total debieron
conformarse con 3.000 pesos y escaparon sin que la víctima pudiera ver en qué
rodado lo hicieron.




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