La historia se repite en esta clase de delitos en donde los
hombres, en muchas oportunidades, caen. En este caso J. (así lo llamaremos) se
presentó en la comisaría para denunciar un intento de extorsión en su contra en
donde le exigieron 20.000 pesos para evitar que avance una causa en su contra
por grooming.
Más temprano, por la mañana, una usuaria de Facebook llamada
Melii lo contactó mediante el mensajero de la red social. Así de la nada, según
su relato, y por arte de magia esa supuesta chica le empezó a mandar fotos
desnuda y a pedirle por un encuentro íntimo.
J. se dio cuenta y la cortó la comunicación. Horas después
desde un número de Mar del Plata lo llamó un supuesto comisario con una
supuesta orden de una jueza para ir a detenerlo. Pero el comisario era tan
bueno que podía frenar todo si le enviaban 20.000 pesos. Una historia muy
trillada y con varias víctimas el año pasado a nivel local.
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