Javier Méndez vive en Cuba entre Paraguay y Bolivia del
barrio Belgrano y fue víctima del hurto de pertenencias de su casa por, según
anticipa su entorno, un ex compañero de trabajo que no puede encontrar.
La mujer relató que el presunto delincuente pidió cobijo
luego de haberse distanciado de su mujer. Como ambos se conocían de haber
comenzado a trabajar hace unos días juntos en el mantenimiento de parques y la
relación era buena, Javier accedió a darle la llave de su casa y llevarlo para
que pudiese pasar unas noches ahí.
El miércoles pasado el dueño de la propiedad salió a
trabajar, regresó a las 5 de la tarde y se recostó en la cama para descansar.
La vivienda aparentaba estar normal y sin la presencia de su amigo. Tan cansado
estaba que recién al levantarse notó que le faltaba una garrafa, el equipo de
música y una motoguadaña.
En ese momento comenzó a llamar a I. (como lo
identificaremos) pero nunca obtuvo respuesta. Tampoco le leía los mensajes de WhatsApp.
Ante esto fue a la comisaría –siempre según el relato de la madre- y en la
dependencia se negaron a tomarle la declaración porque le explicaron que el
sospechoso no tenía una residencia fija por lo que se volvería difícil
investigar.
Sin respuestas la familia decidió hablar para dar algunos
detalles más acerca del hecho. En CNM Radio pudieron agregar que el hombre al
que se le había dado cobijo llamó a un remís en donde cargó los elementos para
luego darse a la fuga y nunca más se presentó a trabajar.




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