Ya en la etapa final de obra para aumentar el caudal de agua
en reserva de la comunidad, ABSA, la empresa contratista y el municipio
trabajan para hacer los últimos trabajos de empalme de la cañería que
transporta el fluido desde los pozos hacia el nuevo reservorio y desde el mismo
hacia el sistema distribuidor de cañerías.
Por eso, desde esta madrugada la ciudad quedará con la
disponibilidad de agua del tanque tradicional distribuidor y se le solicita a
los vecinos reducir al mínimo el consumo. Principalmente se pide que no llenen
piletas, laven autos o hagan tareas de riego.
Esta mañana en CNM Radio, la secretaria de obras públicas Diana
Markovic explicó que se practicará una baja de presión para racionalizar la
salida y permitir que se estire el tiempo de disponibilidad de la misma.
Por eso, también recordó que la gente que tenga tanques
aproveche en cargarlos esta noche y aquellos que se nutras de la red de manera
directa eviten encender lavarropas o lavavajillas porque habrá muy baja presión
durante la mañana del miércoles.




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