Luego de la trascendencia nacional que tuvo el caso que
terminó con Claudio Estigarribia detenido por abusos sexuales gravemente
ultrajantes contras su hijastra durante unos 7 años, en la ciudad se generó un “efecto
cascada” con denuncias de diferente tipo que tienen a menores como víctimas.
Desde abusos sexuales simples, con tocamientos, hasta
algunos gravemente ultrajantes y reiterados. No obstante, no hay aún detenidos
porque restan diligencias para poder recolectar pruebas contra los denunciados.
Otro impedimento para un avance rápido de la justicia es
que, en ciertas exposiciones, se hace saber a la justicia que son de vieja
data, lo que complica aún más obtener aquellas pruebas más contundentes.
Según pudo saber CNM, se realizaron pericias médicas en
aquellos casos en donde se informó de violaciones para contar con un primer
informe sobre posibles vestigios que hayan quedado en las víctimas.
Por estas semanas se tomarán declaraciones en los casos y, siempre,
las menores estarán acompañadas por psicóloga, personal del Servicio Local y la
Defensora Oficial de Menores.
Una de las fuentes consultadas reconoció que el caso del ex
policía marcó un antes y un después. “Fue en click para vecinos, abuelos o tíos
que se presentaron a denunciar. En algunos aspectos los propios papás de las
afectadas tenían miedo de dar a conocer a las autoridades lo sucedido”.




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