El hecho ocurrió el pasado domingo en una vivienda del barrio Santa Lucía de Posadas, cuando Mateo estaba jugando con un hermano mayor. El bebé se tragó frutas de un ligustro que ingresaron por las vías respiratorias y se alojaron en el pulmón.
Primeramente, fue llevado al CAPS de Itaembé Miní, donde se le hicieron las tareas de reanimación y desde allí fue derivado de urgencia al Hospital pediátrico. Mateo sufrió dos paros cardiorrespiratorios.




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