"La mujer de él (Mary) está viviendo con custodia policial", ya que por recomendación del psicólogo que lo trata el hombre se quedará en su hogar acompañado de otros familiares, relató una vecina a Télam.
Portando carteles de "Justicia por Maxi" y "Chascomús: basta de maltratos", varios manifestantes afirmaron a la agencia que "los abusos son algo naturalizados acá", en la ciudad bonaerense famosa por el turismo de pesca en la laguna.
Cristina Rocha, amiga del matrimonio, expresó: "Pedimos que saquen al juez. Es una aberración. Como madre vengo a pedir justicia".
Carlos, un amigo y ex compañero de trabajo en el municipio, consideró que "el juez está errado con esta actitud: los tipos tienen que estar presos. Vine a respaldarlo (al amigo) porque lo conozco hace muchos años".
Una joven se acercó a la periodista para decir: "Tenemos miedo porque uno de los acusados también es remisero. Nos da vergüenza que Chascomús esté en cadena nacional por estos casos".
La marcha se realiza en protesta por la decisión de la justicia de Garantías local que no hizo lugar a un pedido de detención de los cinco imputados formulado por la Fiscalía que interviene en el caso.
Ayer se concretó una primera movilización con la intención de que los familiares del trabajador abusado fueran recibidos por el juez Christian Gasquet, para pedirle que dicte la prisión preventiva a los acusados, pero el magistrado se negó a mantener la reunión.
Gasquet no avanzó en la situación procesal de los acusados porque consideró que "no hay prueba de abuso".
"No es como dice el juez: hay un video y hay testigos que declaran las cosas que a mi marido le hicieron, en el video se muestra como lo humillan", expresó Mary, esposa del trabajador ultrajado.
Los gremios UPCN y ATE emitieron una nota informando al Intendente municipal de la primera movilización, y anunciaron la de hoy.
Los abusos fueron denunciados el 9 de este mes por el empleado ante la fiscalía de Chascomús, donde hizo un pormenorizado relato de los vejámenes a los que fue sometido.
El recolector de residuos contó que los ataques comenzaron hace 10 meses, con agresiones físicas como "golpe y pellizcos" que fueron incrementándose hasta que le "bajaban los pantalones" e incluso lo penetraron "con los dedos" y un "frasco de perfume".
Las agresiones siempre eran cometidas por más de una persona y por las noches y madrugadas, en horario de trabajo, muchas veces veces a bordo del camión o detenidos en caminos despoblados, yendo al basural.
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
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