Lucía tenía 19 años. Atravesaba su primera experiencia laboral en una empresa que luego de un tiempo le permitió crecer. Tuvo muchos compañeros y supervisores que vieron su potencial. Entre ellos, uno de sus jefes, 11 años mayor que ella, que no tardaría demasiado en marcar su vida.
La mujer relató su historia en un tuit que, con el correr de las horas, se volvió viral. Allí expresó: “Hace años tuve un amor platónico con mi primer jefe. Estábamos en pareja y no nos animamos a vivirlo”.
Gonzalo, el hombre en cuestión, decidió renunciar a su cargo en 2013, en pareja y con una hija. Lucía, que también fue madre y finalmente se separó del padre de su hija, recordó aquella despedida: “Me dijo ‘si tiene que ser, va a ser. No importa cuánto tiempo pase’”.
En diálogo con TN, recordó que aquella promesa se dio en el marco de un ambiente laboral en el que jamás mezclaron los sentimientos con sus responsabilidades: “Él nunca hizo diferencias conmigo por esa buena onda que nos unía. Todo lo contrario, trataba de alejarse para evitar los rumores en la empresa”.
Sin embargo, para cuando ambos intentaron ocultarlo ya era tarde. Todos sabían que a él -que no estaba casado pero sí de novio- y a Lucía los atraía una energía especial.
“Después me puse en pareja, quedé embarazada y se cortó todo. Todo lo platónico digamos. Él me dejó de hablar, literalmente. No teníamos contacto. Con el correr de los años me terminé separando. Crecí en la empresa y él pasó a ser mi jefe directo. Lo que pasaba entre nosotros era inevitable”, confesó Lucía.
Ambos prefirieron contenerse a darle rienda suelta a una concreción que podía dinamitar sus relaciones. “Sabíamos que alguien podía salir lastimado. Estaba enamorada de él, pero no hacíamos nada porque sabíamos cómo era la situación”, dijo.
Cuando ocurrió la renuncia de Gonzalo, ambos lloraron, se abrazaron y se dijeron a los ojos todas las cosas pendientes. Él le indicó que no era el momento, pero que si tenía que pasar iba a pasar.
La promesa que finalmente cumplió el jefe de Lucía
En su tuit, Lucía completó la historia con el desenlace tan esperado: “Pasaron 14 años y acá estamos: viviendo ese amor. Necesitaba compartirlo, soy muy feliz”.
En el medio, durante todos los años en los que se hablaban, pero no se veían, ella tuvo otra relación y él finalmente se separó. “Me escribió durante la pandemia y me dijo que estaba solo, pero yo seguía de novia”, rememoró Lucía.
Fue en el medio del Mundial, seis meses después de haberse separado de su último novio, que Lucía soñó con él. Ocurrió una noche y a la siguiente también. “Le mandé un mensaje para contarle y comenzamos a hablar. Quedamos en vernos un viernes. Fue gracioso porque yo me olvidé y me fui a una quinta. Él me escribió para preguntarme qué hacíamos esa noche. Podríamos decir que lo dejé ‘plantado’”, narró.
Entre los cientos de comentarios que recibió por su tuit, una usuaria cuestionó: “¿Te imaginás enterarte que hace 14 años tu pareja estaba enamorada de otra persona mientras sigue con vos y encima hablan? Y piensan que no es infidelidad porque no hubo algo físico”. Lucía le respondió: “No entendiste, reina. Estuve años sin verlo y cada uno haciendo su vida”.
Cuando finalmente se vieron compartieron una charla extensa y un par de botellas de vino. “Fue en pleno Mundial y desde ahí no nos separamos. Él maduró mucho, es otra persona”, sostuvo Lucía.
Él, que prefiere no exponer su rostro ni dar demasiados detalles sobre su vida, ya no quiere separarse de ella: le propuso pasar el fin de semana lejos de Buenos Aires. “Estamos haciendo vida de pareja. Así que sí, le dije que sí: el fin de semana nos vamos de viaje”, completó Lucía.
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
Redes