Emborracharon, golpearon y abusaron de una nena wichi de 12 años

Una nena de 12 años, perteneciente a la comunidad indígena wichi, fue salvajemente atacada a golpes, abusada sexualmente y alcoholizada. La pequeña sobrevivió a la brutal agresión y fue trasladada de urgencia al Hospital Juan D. Domingo Perón de Tartagal, y su diagnóstico permanece reservado.

La niña vive con su familia en la colectividad de Bajo Grande, al norte de la localidad Santa Victoria, y se caracteriza por ser una de las comunidades con menos recursos y se sitúa como uno de los pueblos originarios con mayor desnutrición .

Sobre el caso, la pequeña fue encontrada cerca de la Escuela N.º 4.670 y con un estado de salud delicado: sufrió estrangulaciones y presentaba rasgos de haber sido atacada ferozmente con un palo. Además, la pequeña de 12 años sufrió abuso sexual tras ser severamente alcoholizada.

Rápidamente, fue trasladada en un vuelo sanitario hacia la ciudad salteña de Tartagal para seguir de cerca su delicado estado de salud. La primera hipótesis del principal agresor de la niña tiene que ver con un familiar, aparentemente su primo, según constató el padre de la criatura, Gustavo Mendoza. Sin embargo, se supo que el menor fue liberado por orden judicial.

En tanto, la madre de la niña de 12 años fue quien la encontró en total estado de indefensión y ratificó que la descubrió "tirada como un perro". La directora de la Secretaría de la Mujer, Itatí Carrique, desechó la posibilidad de que la agresión se trate de una práctica sexual de nombre "chineo" que la practican los denominados hombres de clase "criolla".

¿Cómo sigue el estado de salud de la niña wichi?

Pedro Urueña, uno de los responsables del Hospital Juan D. Domingo Perón, confirmó en un medio local que la pequeña se encuentra "fuera de peligro" a pesar del ataque feroz recibido el pasado jueves.

La niña de 12 años quedó bajo supervisión del sector de pediatría, ante la mirada atenta de ginecólogos y psicólogos que siguen de cerca la evolución de su cuadro de salud.

Urreña constató que la nena sufrió traumatismo de cráneo y abuso sexual, con perdida de conocimiento en el momento de la agresión. El gerente del sanitario ubicado en Tartagal sostuvo que, afortunadamente, se recupera del brutal ataque. En esa línea, el médico agregó que "este caso refleja las vulnerabilidades".