Una historia de pasión que no prosperó y que terminó con un teléfono
celular de más de 50.000 pesos –nuevo- en manos de quién no es su propietario.
Así, se puede resumir esta historia que tuvo lugar en nuestra ciudad en las
últimas horas y que terminó con una denuncia penal por el hurto del aparato
marca Samsung Galaxy.
Todo comenzó con chateos por Facebook. Ambos se conocían, al
menos de vista, y los chateos comenzaron a vislumbrar una eventual historia que
permitiría que ambos se conocieran.
El encuentro se produjo en la casa de ella, sobre Calle 2,
pero el denunciante sólo pudo acceder al terreno y no a la casa. La joven lo
recibió con un beso apasionado y él notó que con su mano –según su denuncia- le
extrajo el teléfono celular que tenía en uno de los bolsillos de su jean.
“Me rodeó la cintura y con su mano derecha me sacó el
celular”, pudo relatar el damnificado al denunciar el caso en la policía.
Por su parte, la mujer le pidió unos minutos para ir al
interior de la casa para avisar a su familia de que saldría durante algunos
minutos con el hombre. Él cree que allí apagó el aparato y lo dejó en el
interior de la vivienda.
Ambos siguieron hablando y, de manera insistente, el joven
le remarcó que se había dado cuenta mientras que ella se defendió y le reiteró,
una y otra vez, que posiblemente se le había caído durante el viaje hacia su
casa.
Se inició una causa por hurto.




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