“Sufrí una gran estafa por tener dinero en el Banco
Hipotecario (sucursal Bahía Blanca)”, afirmó Melina González, beneficiaria del
programa ProCrear. “El jueves 30 de diciembre de 2021 me depositaron el segundo
desembolso del crédito en la cuenta que fue abierta exclusiva para ese fin, y
el domingo 2 de enero de 2022 se gestionó una transferencia desde mi cuenta sin
mi consentimiento desde el banco hacia un destino que desconozco y el banco no
informa ni investiga: me robaron”, agregó.
“Ni abrí ningún link malicioso. No tengo grabada las
contraseñas en ningún sitio. Sólo uso mi internet como cualquiera de nosotros
desde mi teléfono. La estafa fue dejarme sin línea y usaron mi línea Movistar
para que llegue aparentemente un SMS de confirmación de transferencia DEBIN, un
domingo a la hora 0, por montos que superan los quinientos mil”, explicó.
“¿Cómo se gestiona una transferencia DEBIN sin siquiera
haber ingresado al home banking? ¿Por
qué el Banco sigue brindando la opción de SMS si sabe que no es segura? Y
sabiendo lo que está ocurriendo, porque esto no es nuevo sino que es una
práctica conocida que afecta a varios bancos y desde hace varios meses”,
amplió.
González salió sorteada para recibir un crédito del Procrear
el año pasado. Ahí nació un sueño que hoy entró en un by-pass que le impide
mantener la ilusión de tener su casa propia, al menos en los tiempos que ella
lo tenía previsto.
“Un domingo, cerca de las doce de la noche, se transfirieron
más de un millón de pesos sin dejar rastro y sin mi intervención. El banco me
respondió que, como usaron mi línea celular, que en realidad el Banco brinda
esa opción como medida de seguridad para recibir clave que el mismo Banco
envía, y que ellos no son responsables. ¿Cómo puede ser que no tengan las
medidas de seguridad para resguardar a sus clientes?”, se preguntó.
La denunciante planteó que, por lo que le sucedió y sabe que
le ha ocurrido a otras personas con el mismo banco (operador habitual de los
créditos Procrear) en distintas ciudades del país, es inevitable dudar del
compromiso de confidencialidad de la entidad crediticia.
“¿Cómo sabían que me habían depositado en esos días? Tengo
mis serias dudas sobre la confidencialidad de la información de los clientes,
¿se está filtrando información?”, expresó.
Denuncias formales ante la Justicia y Defensa del Consumidor
Melina González realizó sendas denuncias en la UFIJ N° 7
(expediente 152-22) y en la Oficina de Defensa del Consumidor (N° 742549).
“De las denuncias espero respuestas. Les comparto esta
triste situación para que conozcan esta modalidad delictiva y que vean cómo
actúa el Banco Hipotecario ante estas situaciones: desamparando y dejando solos
a los clientes”, afirmó.
Un párrafo aparte, indicó, merece el trato dispensado por el
gerente de la sucursal bahiense de la entidad crediticia donde tiene la cuenta
por el crédito del Procrear.
“El Sr. Nicolás P. mencionó no estar al tanto; dijo que
desconocía lo que está pasando y que haga lo que crea conveniente, cuando yo le
planteé que iba a realizar las denuncias del caso”, manifestó.
Esfuerzos que quedan en suspenso
“Esta situación de gran angustia se suma a que he debido
parar la obra de mi vivienda que estaba llevando a adelante con gran esfuerzo”,
dijo Melina González, de 36 años.
“La primera etapa de la casa está terminada; está el techo y
parte de la instalación eléctrica. Falta desde revoque hasta las terminaciones.
Yo esperaba poder mudarme en abril o mayo, y ahora no sé qué va a pasar…la
ilusión de tener mi casa quedó detenida en el tiempo”, lamentó.
La entrevistada dijo que sabe de otros casos “calcados” al
suyo, con damnificados radicados en Coronel Pringles, Neuquén y Ciudad Autónoma
de Buenos Aires.
“Interpreté que el banco iba a investigar y no fue así.
Ahora ni el historial del home banking está disponible. Tengo muchos cuidados y
me robaron igual y me duele decir que no es seguro tener dinero en el banco”,
concluyó.




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