La planta
de aderezos de la marca Dánica, ubicada Villa Mercedes, San Luis, cerrará sus
puertas por decisión de sus propietarios, quienes a su vez acusaron al gremio
local de Aceiteros (SOEAD) como los responsables de haber forzado la situación.
En la fábrica trabajan 130 personas, entre operarios encuadrados en Aceiteros y
administrativos.
“La empresa
AVEX, titular de las marcas Dánica, D’Fiesta y Mayodan, informa el cierre de su
planta de producción de aderezos en Villa Mercedes (provincia de San Luis) a
causa de la imposibilidad de reconducir el dilatado conflicto sostenido por el
gremio local de Aceiteros (SOEAD)”, dijo la empresa a través de un comunicado.
El
detonante del cierre, según voceros de los empresarios, fue la homologación la
paritaria con Aceiteros, que establece un incremento salarial de 70%.
“Un erróneo
encuadre sindical de la actividad y una representación sindical violenta e
irascible que ha radicalizado desmedidamente las relaciones laborales (incluso
perpetrando sabotajes en las líneas de producción) han tornado inviable el
sostenimiento de las operaciones en dicha en la planta, con el consecuente
desabastecimiento de productos en las góndolas de todo el país”, agregó la
compañía.
Dánica/AVEX
es propiedad del Grupo Beltrán, de origen cordobés y uno de los más fuertes del
país en la industria frigorífica. En 2018 adquirieron al grupo brasileño BRF
(que se estaba yendo de Argentina) esta unidad de negocios, con fábricas en San
Luis y en la bonaerense Llavallol. En esta última planta es donde se fabrica la
clásica margarina Dánica, así como de otras marcas como Manty. En la planta de
Villa Mercedes elaboran aderezos como mayonesa, mostaza y ketchup, los cuales
tienen una fuerte presencia en las góndolas de los supermercados, dentro de las
marcas más económicas.
El
conflicto con el gremio de Aceiteros es por un tema de encuadre gremial. Desde
que adquirió Dánica, el Grupo Beltrán pidió cambiar el encuadramiento de sus
operarios al del gremio de Alimentación, cuyos salarios son más bajos. Ni el
ministerio de Trabajo de San Luis ni el de Nación accedieron a este reclamo.
Pero en la planta de Llavallol concretaron un acuerdo con el gremio que
retrotrajo los aumentos salariales a un año atrás. Con la filial gremial de
Villa Mercedes, en cambio, no hubo acuerdo.
“La
situación se agrava con otros factores del contexto, como el impacto de la fijación
de precios máximos para los productos alimenticios que produce la empresa, el
abrupto incremento del precio internacional de los “commodities” de los
insumos, así como la reciente homologación de un acuerdo paritario que impone
un incremento salarial en torno al 70% para la actividad”, agregó el comunicado
de la empresa.
La empresa
informó que inició el procedimiento ante el ministerio de Trabajo de la Nación
para cesantear a sus empleados en el marco del artículo 247 de la Ley de
Contrato de Trabajo, que prevé una indemnización del 50%.
El titular
de la filial de Aceiteros en Villa Mercedes es Juan José Domínguez, quien
rechazó los argumentos de la empresa y exigió que paguen indemnización doble a
los 105 operarios sindicalizados.
“Hace 32
años que en esta empresa se paga (el convenio de) Aceiteros. Si la empresa
quiere irse, que haga lo que dice la ley, pagar el 200%. Que pague la doble
indemnización para poder irse”, dijo Domínguez en declaraciones a la radio
LV15.
Tras acusar
al Grupo Beltrán de “no querer pagar” lo que establece el convenio de
Aceiteros, Domínguez dijo que desde el gremio no ven mal que la empresa termine
yéndose de la provincia. “Sería para bien que (los trabajadores) cobren todo
(lo que establece el convenio), pero también sería para bien que esta empresa
se vaya, indemnice como tienen que indemnizar a los compañeros, pero que nos
deje tranquilos. No puede ser que cada cuatro meses estemos hablando de
Dánica”, agregó Domínguez.
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
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