Ya con valores exhorbitantes y la falta de colectivos, los taxis se volvieron opción para ir a localidades como Madariaga, Villa Gesell, Pinamar o Mar del Plata.
Los valores van en ascenso y, a medida que se acerca la restricción en el AMBA, crece la desesperación por alejarse del sitio en donde la mayoría quedarán encerrados.
Hablamos con un chofer que nos ofreció ir por 7.000 pesos por persona. El auto lleva hasta 3 personas y el valor incluye peaje.
De noche los controles no existen ni en ruta y, a veces, tampoco en las entradas a los pueblos, según comenta el conductor.
El auto tiene mampara, nadie se sienta adelante y todos con permisos obligatorios. El mismo taxista te pasa los datos de la patente para poder tramitarlo y llega a orientarte cómo hacerlo.
El vehículo te deja en el acceso a la ciudad o zona aledaña para que puedas entrar caminado por “los costados” de los controles. También podés llamar un Remís local y acceder a la ciudad sin dar tantas explicaciones acerca de tu origen.
Si tu documento tiene el domicilio en la misma ciudad hacia dónde vas es todo mucho más simple.
El chofer nos cuenta una experiencia tras otra. Agrega datos y conoce cada uno de los puestos de control. Da a entender que la falta de viajes en Buenos Aires allanó el camino para estos viajes de larga distancia.
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
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