Luis Matías Toledo y Hugo González, ambos de 30 años, deberán purgar sus penas en prisión.
El ilícito ocurrió cuando entre tres presos – uno de ellos identificado como Lucas no fue juzgado – tomaron a la víctima dentro de un calabozo y la obligaron a bajarse los pantalones para realizarle un tatuaje de una manzanita en una de sus nalgas.
“No te vamos a hacer nada”, le dijeron a la víctima quién, por miedo, se vio forzado a acceder y se bajó los pantalones.
Mientras lo tatuaban uno de ellos comenzó a exigirle que le toque los genitales y, ante la negativa, hubo una pelea dentro del calabozo hasta que la víctima logró llamar a los oficiales de guardia.




Redes