
Los jóvenes visionarios dijeron que la Virgen María -o la Virgen de Fátima, en honor a la localidad donde supuestamente se apareció- les había confiado tres secretos en forma de profecías durante seis visiones.
Este sábado, cientos de miles de personas se reunieron para celebrar la canonización de dos de ellos, Jacinta y Francisco Marto, quienes murieron a los 10 años de edad a causa de una epidemia de gripe. La tercera, Lucía Dos Santos, se hizo monja y murió en 2005 (y está en proceso de beatificación).
Los hermanos Marto son los primeros niños en la historia de la religión católica proclamados santos sin ser mártires.
Cerca de 500.000 feligreses saludaron con entusiasmo al papa Francisco mientras se aproximaba al santuario en una ceremonia que ha reavivado un intenso debate en torno a uno de los mayores misterios modernos de la Iglesia católica.




Redes