Ante los agentes de tránsito reconoció que pasó en rojo el semáforo, que no llevaba casco, que la moto no tenía patente y presentó una cédula verde a nombre de otra persona y vencida.
Tras el secuestro del rodado marca Corven y su traslado a la comisaría se le realizó el test de alcoholemia y el mismo arrojó positivo.
Para sumarle algo más a su historial se detectó que, en lo que va de 2016, ya había sufrido otras 6 infracciones y en dos casos se le secuestraron distintas motocicletas que aún están en el depósito municipal.
Una vez más, desde la Jefatura de Tránsito, recordaron sobre la obligatoriedad de utilizar casco a la hora de circular en moto




Redes