El terrorífico suceso ocurrió en la casa Atthaporn Boonmakchuay. El hombre sintió un fuerte dolor en su pene y al ver se dio cuenta que una gigantesca serpiente pitón lo había mordido.

En medio del temor a perder sus genitalidad, el hombre salió con un brillante plan mientras el pequeño baño seguía llenándose de sangre y gritos de dolor.
Le pidió a su mujer que le pasara una cuerda y logró amarrar la cabeza de la tremenda serpiente de cuatro metros a la manilla de la puerta del baño (como un diente de leche) y pudo zafar sólo minutos antes de caer desmayado por la intensa pérdida de sangre que le provocó el insólito accidente.
El hombre que fue rápidamente trasladado al hospital luego del colapso que significó la batalla durante su rutina matinal. Actualmente se encuentra estable.




Redes