La canasta básica total (CBT) registró una suba de 0,9% en
abril, por lo que una familia de cuatro integrantes necesitó $1.110.063 para no
caer en la pobreza, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos
(INDEC). La canasta básica alimentaria (CBA), por su parte, aumentó 1,3% en el
cuarto mes del año y de esta forma un grupo familiar tipo requirió de $502.291.
De esta forma, el aumento de las canastas fue menor a la inflación de abril,
que fue del 2,8%.
Con los datos actualizados, la CBT acumuló un incremento del
8,4% en lo que va del año, mientras que el del CBA llegó al 11,8%. En cuanto a
variación interanual, almacena 34% la CBT y 34,6% la CBA.
El último dato de la pobreza alcanzó al 38,1% de las
personas y al 28,6% de los hogares en el segundo semestre de 2024, según el
INDEC. En tanto, 8,2% de las personas en el país se encuentran en situación de
indigencia, una baja de 9,9 p.p. (puntos porcentuales) con respecto al informe
del primer semestre del 2024.
La CBA se ha determinado tomando en cuenta los
requerimientos normativos kilocalóricos y proteicos imprescindibles para que un
varón adulto de entre 30 y 60 años, de actividad moderada, cubra durante un mes
esas necesidades (adulto equivalente).
A su vez, se seleccionaron los alimentos y sus cantidades en
función de los hábitos de consumo de la población a partir de la información
provista por la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGHo).
Para determinar la CBT se amplía la CBA considerando los
bienes y servicios no alimentarios. La estimación se obtiene mediante la
aplicación del coeficiente de Engel (CdE), definido como la relación entre los
gastos alimentarios y los gastos totales observados en la población de
referencia.
La composición de cada hogar, en términos de adultos
equivalentes, determina un valor de CBA específico para ese hogar. Ese valor
surge de la multiplicación del costo de la CBA del adulto equivalente por la cantidad
de adultos equivalentes que conforman el hogar.
Fuerte caída en la venta de frutas
La ingeniera agrónoma y presidenta de la consultora Top Info
Marketing, Betina Ernest, afirmó que el consumo de frutas y verduras "cayó
en la Argentina". "El consumo de frutas y verduras cayó en el país.
Tenemos una crisis sobre la crisis", aseguró Ernest.
En declaraciones a "Ensobrados", de Splendid AM
990, la presidenta de Top Info Marketing manifestó que lo que mas cayó fue
"la venta de frutas tradicionales", entre las que se encuentran la
manzana, la pera, la banana, la naranja, entre otras.
Aseguran que los productores están desesperados porque la fruta se deja de comprar si no es cómoda ni práctica.
Por otra parte, sostuvo que está "socialmente
aceptado" decir que "se comen frutas". El consumo masivo en
supermercados y autoservicios también registró caídas.
En marzo, registró una baja del 5,4% interanual y acumuló un
retroceso del 8,6% en el primer trimestre de 2025. El reporte reflejó que el
derrumbe en las ventas fue mayor en las cadenas de supermercados, ya que
tuvieron una merma del 7,1% en el tercer mes del año frente al mismo período de
2024 mientras que en los comercios de barrio la caída alcanzó el 3,7%.




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