Una vecina del barrio Belgrano, en la calle Venezuela, denunció el hurto de dos medallones y una pulsera que eran de su propiedad y que sacó para mostrárselas a unas personas que se acercaron a su vivienda para ofrecerle alhajas que tenían a la venta.
Uno de los investigados es conocido de la mujer porque anteriormente se acercó a venderle distintos productos de librería. Por eso ella confió y dejó que ingresen al domicilio.
“Ustedes no saben lo que tengo yo” fue lo que dijo al ver lo que le ofrecieron y empezó a sacar los medallones, uno de ellos de la Virgen Milagrosa, de oro de 18 kilates.
En un instante le pidieron un vaso con agua y, presume, el hurto fue cuando ella entró a la cocina.
La charla amena continuó y los visitantes se retiraron sin mayores problemas. Recién al entrar se dio cuenta que faltaban todas las joyas que había sacado para mostrar.
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
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