Una conversación escalofriante fue captada dentro en el
marco de una investigación contra una presunta banda dedicada a la venta de
droga en las localidades de San Lorenzo y Ricardone, situadas en el cordón
industrial del Sur de Santa Fe. Se trata de un joven de 21 años que, en un
diálogo telefónico, le suplicó a su madre para que lo interne por sus
adicciones, porque no quiere “matar a más gente”.
La llamada telefónica entre el sospechoso y su mamá data de
octubre del año pasado y aún investigan a qué crímenes hace alusión durante la
comunicación. De acuerdo al expediente, y a la desgrabación a la que tuvo
acceso Infobae, el presunto sicario le dijo que estaba “desesperado” por la
falta de dinero y le manifestó que deseaba internarse o suicidarse por la
situación que vivia, derivada del consumo de drogas
“Por favor, ayudame. Hoy estoy tranquilo. Mañana me agarra
la desesperación y no quiero matar a más gente. Me chupa la verga (sic) si
tengo el teléfono pinchado. No me interesa más nada. No puede ser. El viernes
fui a matar a uno por 30 mil pesos, mami”, reveló.
“Estoy tirado. No quiero matar a más gente, mami. Me pudrí
de matar gente. No quiero saber más nada con boletear gente, nada por dos con
cincuenta. Intername, ahí estoy tranquilo. Por treinta lucas, mami, boleteé a
una persona que no sabía ni quién era”, agregó.
Lo curioso es que la madre del sospechoso intentó calmarlo y
le propuso montar un negocio para vender estupefacientes, justamente, el
problema que tiene mal a su hijo. “Hacemos una pescadería de pantalla, boludo
(sic). Vamos a embolsarla nosotros. Con vos pila hacemos cualquier cosa los
dos, negro”, le sugirió la mujer.
La charla figura dentro de una investigación que se inició
en mayo del año pasado en la Fiscalía Federal N°2 de Rosario, a cargo del
fiscal Claudio Kishimoto, donde se avanzó contra una presunta organización
dedicada a la distribución de droga en el departamento San Lorenzo, cuyas
operaciones se habrían ramificado a Ricardone, Rosario, Capitán Bermúdez,
Puerto Gaboto, Fray Luis Beltrán y la Ciudad de Buenos Aires.
Después del diálogo telefónico que causó sorpresa entre los
investigadores, ya que el sospechoso se sabe investigado y, pese a eso, comentó
los delitos que habría cometido, el presunto sicario cambió su vida en cuestión
de meses. Según la investigación federal, el joven pasó en octubre de 2021 de
no tener dinero a comprar un Volkswagen Bora full en marzo de 2022.
El presunto gatillero, en otra charla telefónica que está en
la causa, le cuenta a su novia que actualmente le deben cuatro millones de
pesos. Se cree, que por la venta de estupefacientes.
El 5 de mayo pasado la Policía Federal detuvo a 11
sospechosos de integrar la estructura bajo investigación después de la orden de
allanamiento firmada por el juez Carlos Vera Barros, a cargo del Juzgado
Federal Nº3 de Rosario. Entre los arrestados está el sospechoso de 21 años.
De acuerdo al parte emitido por el Ministerio de Seguridad
de la Nación, los operativos de mayo se hicieron en 23 domicilios del Gran
Rosario y dos de Puerto Madero, en la Ciudad de Buenos Aires. Los policías
federales secuestraron un kilo de marihuana, 30 dosis de cocaína, 465.900
pesos, 200 dólares, 22 cartuchos de escopeta calibre 16, seis autos, 4 motos, 5
balanzas de precisión y 15 teléfonos.
Fuente Infobae
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
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