Les capturaron dos tarros de aerosol y quedaron aprehendidas durante algunos minutos mientras se les realizaba el acta contravencional por causar daño a una propiedad privada.
Es la primera vez en mucho tiempo que en nuestra ciudad se realiza este tipo de acta contravencional y la palabra obsceno aparece en el documento que recibirá el juez de paz, Pablo Rodríguez, el próximo lunes cuando ingrese a su despacho.
La ley contravencional establece una multa para esta clase de actos que son considerados vandálicos y que podría rondar entre los 2.000 a 7.000 pesos.
La polémica por esta clase de expresión para visualizar un reclamo vuelve al ruedo por la clase de metodología, muy ligada al conurbano o ciudades grandes, que la sociedad local rechaza. En septiembre de 2016 sectores ligados a la izquierda pintaron las paredes del edificio Coccari para pedir por el boleto estudiantil, el fin de la impunidad y cárcel a los genocidas. A plena luz violaron el mismo artículo contravencional y una ordenanza municipal. Ya en febrero de este año nuevas pintadas opositoras al Macrismo dejaron su marca en paredes de la Sociedad Rural, el Correo Argentino y la casa del concejal Marcos Jovanovic y tras este segundo acto fue que se les solicitó a las fuerzas de seguridad de la ciudad que intervengan para castigar el ataque contra monumentos y propiedades privadas.
GENERAL JUAN MADARIAGA El Tiempo
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